Cotidianamente estamos en contacto con la música, lo que no significa que podamos, tanto los niños como los adultos estar aumentando nuestra capacidad, de percepción, de reproducción de sonidos, de creación, ni siquiera juicio crítico sobre distintas obras.
Es verdad que la música integra la vida de los niños, ya no es patrimonio de unos pocos que podían tener un instrumento, ejecutarlo, o simplemente estar en un concierto, o en contacto con un coro.
La tecnología, brinda la posibilidad de educarse musicalmente.
La tecnología, brinda la posibilidad de educarse musicalmente.
Al ser la música una parte importantísima de la educación de los niños, no debe ser tomado como un instrumento de relleno de las actividades en la sala, tomarlo con ligereza, restándole importancia, es algo que la escuela no debiera hacer.
Es el jardín de infantes el que debe aportar la continuidad a esta educación musical al alcance de todos que provee la vida moderna, sistematizarla y asegurar la vivencia de los hechos musicales de los alumnos.
Puede valerse el docente, de varias herramientas, empezando por el cuerpo, vivenciando la música con todos los sentidos posibles, a través del juego, de la utilización de instrumentos musicales, de la creación de cada niño.
Lo importante es que el docente a demás de saber música sienta la música. Si la maestra incluye a la música en cada momento en la sala: cuando guardan, cuando hacen una ronda, cuando saludan a la bandera en momentos en que el grupo debe reunirse, que sepa la maestra hallar el ritmo, acento y pulso, que emita su voz en forma melodiosa, que trasmita el encanto de un silencio y el carácter de un trozo musical.
Es importante que la docente esté en contacto con un profesional del área, ya que le amplia las posibilidades. La maestra de música, puede ayudar a la maestra de la sala, orientarla, de manera que haya continuidad y unidad de la acción, lo que sin duda redundará en beneficio para los niños y sus aprendizajes.
Como disciplina requiere un tiempo, apoyo institucional, apropiación por parte de los alumnos, y la responsabilidad del docente de buscar los medios adecuados para poner al niño en contacto con la música y bajar contenidos.
Habría que afianzar en los niños, y porque no en los grandes, el placer por la escucha, la acción y la producción musical.
Para esto es importante la realización de este trabajo, donde como docentes podamos reflexionar acerca de nuestra tarea, importancia con respecto a la educación musical en el nivel inicial.